lunes, 23 de julio de 2007

"MIS MEJORES DÉCIMAS" DE GERMÁN DE LA MAZA VÁZQUEZ



El decimero tuxteco Germán de la Maza Vazquez ha presentado su libro MIS MEJORES DÉCIMAS, CABALGANDO EN SOTAVENTO. Ejemplar que fue puesto a consideración de los lectores el 14 de julio en el Auditorio Lilia Berthely del Museo Tuxteco de Santiago Tuxtla, Veacruz y auspiciado por la Peña Literaria. Participaron personalidades como el Lic. Luis Miguel Díaz del Castillo, Lic. Diego Herández Medina, Prof. José Luis Miranda Rosario, Prof. Flavio Ramón Mendoza Fragoso, Trío Toxtlán (de Rosendo Mendoza, Onésimo y Pedro Chagala) Grupo sonero "Río Crecido" dirigido por el Médico Veterinario Héctor Luis Campos, Germán de la Maza Díaz, entre otros. En un recinto abarrotado hasta los portales el autor convidó a todos los asistentes vino de honor y bocadillos.


Del libro en tratando les convidamos la siguiente composición, ya muy popular.




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LOS FRIJOLES.

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Cómo los quiero negritos

por ser buenos compañeros

del pobre y del con dineros

con unos totopos fritos

mis queridos frijolitos

cómo no voy a quererlos

refritos para comerlos

en la cena o el banquete

no faltará un alcahuete

que diga no conocerlos.


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Los recuerdo con cariño

y los quiero como hermano

sabiendo que el mexicano

se los come con tocino

si comer es mi destino

mi apetito no se pierde

los quiero con chile verde

epazote y calientitos

oh, mis queridos negritos

no me hagan que los recuerde.

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Si vas a comer frijoles

te debes lavar los dientes

los come hasta el presidente

son mejor que caracoles

ríndele santos honores

y no te andes con ambages

no presumas de potajes

pidiendo carne con soya

pide unos frijoles de olla

y prepárate a otro viaje.

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Si el hambre no se te quita

repite los llenadores

yo conozco unos señores

que comen pepesca frita

cuando no te los den grita

en la fonda o restorán

no los veo, dónde están

me faltan de mil amores

mi platazo de frijoles

con café negro y mi pan.

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Son alimento de lobos

del obrero y campesino

y saben que su destino

será ser pasto de todos

se comen de todos modos

se los comen los soldados

junto con los abogados

chicos y grandes señores

todos piden sus frijoles

ya refritos o guisados.

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Quien no quisiera tener
en su mesa unos frijoles

pa´quitar los sinsabores

de la hora de comer

qué difícil ha de ser

ver una mesa sin nada

llevándote la chingada

con un nudo en la barriga

queriendo comer hormiga

o deseando una empanada.

-

Yo no conozco persona

que no los haya comido

que diga de presumido

que ella jamás se los coma

y cuando el marido toma

olvida la moraleja

que sólo sabe su vieja

al ponerse sus bemoles

cuando no le da frijoles

lo hace pendejo o lo deja.

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